La demanda fue promovida inicialmente contra la Diócesis del Libano-Honda (Tolima) y LUIS ENRIQUE DUQUE VALENCIA, párroco de la Iglesia San Antonio de Padua adscrita a la referida diócesis, quien fuera condenada por acceder carnalmente a varios menores.
Conociendo el recurso extraordinario de casación que fue promovido por la Diócesis del Libano-Honda (Tolima), la Corte Suprema de Justicia profirió la primera Sentencia contra la IGLESIA CATÓLICA que se conoce, por responsabilidad en los abusos sexuales de sus clérigos.
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